Impacto del principio in dubio pro natura en México.

México afronta numerosos desafíos en materia ambiental, desde la deforestación hasta la contaminación atmosférica, y es fundamental fomentar medidas efectivas para protegerlo. Por ello, el 14 de noviembre de 2018, la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación emitió un fallo que abarcó diversos temas de derecho ambiental, al resolver el Amparo en Revisión No. 307/2016, en donde además de incorporar criterios de la Opinión Consultiva OC-23/17 de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, reconoció la doble dimensión del derecho humano a un ambiente sano, ya que señaló su carácter de derecho autónomo, tanto individual como colectivo.

Asimismo, la Corte reconoció la legitimación activa amplia y destacó los principios de derecho ambiental, incluidos el principio in dubio pro natura. Respecto a este principio, la Sala indicó que si en un proceso existe una colisión entre el medio ambiente y otros intereses, y los daños o los riesgos no pueden dilucidarse por falta de información, deberán tomarse las medidas necesarias a favor del medio ambiente, además de que exige que la actuación de las autoridades ante la incertidumbre científica sea a favor de la conservación y protección de la naturaleza. 

La Sala entendió el principio in dubio pro natura no sólo acotado al principio de precaución, sino como mandato interpretativo general de la justicia ambiental, en el sentido de que en cualquier conflicto ambiental debe prevalecer, siempre, aquella interpretación que favorezca la conservación del medio ambiente.

De este modo, México puede asegurar que su desarrollo económico sea sostenible y no se produzca a costa del medio ambiente. También, anima a las empresas e industrias a adoptar prácticas sostenibles que minimicen su impacto ambiental, como utilizar fuentes de energía renovables, reducir los desechos y reciclar materiales. 

Aunado a lo anterior, se puede crear una economía verde que apoye tanto el crecimiento económico como la protección del medio ambiente, por ello es necesario desarrollar estrategias concretas para implementar este principio y así asegurar que sea efectivo en la protección del medio ambiente.